La elección del sofá es algo muy personal que varía dependiendo de cada persona y de cada vivienda —según el espacio del salón, la decoración que tengamos…—. A la hora de comprar un sofá cómodo, hay que tener en cuenta muchos aspectos, como son los materiales con los que está hecho el mueble, las dimensiones que necesitamos para la unidad familiar, el color y mucho más.
Actualmente en el mercado podemos encontrar una gran cantidad de sofás, aunque no todos tienen la misma calidad ni resultan igual de cómodos. Los mejores sofás son los sofás bonitos y cómodos, pero no solo eso…También, los más resistentes y los que mayor tiempo de vida útil nos garantizan.
A continuación, analizamos cómo elegir el sofá adecuado y todo lo que debes tener en cuenta para que tu sofá te dure más tiempo, al mismo tiempo que eliges entre los sofás más cómodos. ¡Comenzamos!
Aspectos a tener en cuenta antes de comprar un sofá
Antes de comprar un sofá es importante que tengas en cuenta una serie de recomendaciones para despejar tus dudas iniciales. Es decir, debes analizar bien qué es lo que necesitas. Fíjate en:
Función del sofá : Hay muchos tipos de sofá, aunque podemos hacer una pequeña distinción en dos: Los sofás comunes y los sofá-cama . Dentro de los primeros nos encontramos los sofás tradicionales, los sofás rinconera, los sofás con chaiselongue, los sofás reláx, etc… Los sofá-cama están disponibles, así mismo, en varios modelos, aunque lo que nos interesa es su función principal. Y es que, a diferencia de los sofás comunes, los sofá-cama están pensados para proporcionar un lugar cómodo donde dormir —por lo general a los invitados—. Normalmente, estos sofás son utilizados en viviendas de reducido tamaño —como los estudios— que no tienen suficientes dormitorios.
: Hay muchos tipos de sofá, aunque podemos hacer una pequeña distinción en dos: Los y los . Dentro de los primeros nos encontramos los sofás tradicionales, los sofás rinconera, los sofás con chaiselongue, los sofás reláx, etc… Los sofá-cama están disponibles, así mismo, en varios modelos, aunque lo que nos interesa es su función principal. Y es que, a diferencia de los sofás comunes, los sofá-cama están pensados para proporcionar un lugar cómodo donde dormir —por lo general a los invitados—. Normalmente, estos sofás son utilizados en viviendas de reducido tamaño —como los estudios— que no tienen suficientes dormitorios. Unidad familiar : A la hora de elegir el sofá, debes tener en cuenta las personas que van a utilizarlo. En base a ello, será aconsejable que compres un tipo de sofá más grande o más pequeño. Los mejores sofás, en este caso, serán los que mejor se adapten a las necesidades de cada unidad familiar.
: A la hora de elegir el sofá, debes tener en cuenta las personas que van a utilizarlo. En base a ello, será aconsejable que compres un tipo de sofá más grande o más pequeño. Los mejores sofás, en este caso, serán los que mejor se adapten a las necesidades de cada unidad familiar. Espacio de la vivienda: Si quieres comprar un sofá cómodo debes tener en cuenta —así mismo— las dimensiones de la vivienda. Es importante que cuando vayas a comprar el sofá te lleves un croquis, o pequeño plano, con las dimensiones y espacio que dispones para poder colocar el sofá. Ello determinará, en gran medida, el tipo de sofá que elijas. Por ejemplo un 3+2 plazas o un 3+1+1 plazas, un sofá con chaiselongue, o un sofá rinconera entre otras.
Cómo elegir un sofá
Hemos dicho que para elegir los mejores sofás hay tener en cuenta una serie de características. Lo primero es buscar sofás bonitos y cómodos pero, también, que estos sean resistentes y duraderos. Así pues, respondiendo a la pregunta inicial sobre cómo elegir el sofá adecuado, es importante que tengas en cuenta los siguientes consejos:
Elección de los materiales : Si quieres comprar un sofá cómodo y que, además, sea muy duradero, fíjate en los materiales. Podemos encontrar varios tipos de tapicería para sofá como es la piel sintética, el cuero, o los tejidos textiles. La elección de los materiales va en función de la decoración que tengas aunque, también, de cuestiones como la usabilidad y la facilidad de limpieza. En el mercado existe una gran variedad de tejidos para diferentes usos, los hay antimanchas, para mascotas etc…. Un ejemplo de ello son los tejidos Aquaclean que aúnan durabilidad y practicidad. El cuero es un material natural muy transpirable e higiénico y aporta una belleza natural al acabado del sofá. Así mismo, el material del soporte o estructura del sofá es también muy importante para garantizar la vida útil del mueble. Debemos fijarnos en soportes resistentes hechos con madera o con metal.
: Si quieres comprar un sofá cómodo y que, además, sea muy duradero, fíjate en los materiales. Podemos encontrar varios tipos de tapicería para sofá como es la piel sintética, el cuero, o los tejidos textiles. La elección de los materiales va en función de la decoración que tengas aunque, también, de cuestiones como la usabilidad y la facilidad de limpieza. En el mercado existe una gran variedad de tejidos para diferentes usos, los hay antimanchas, para mascotas etc…. Un ejemplo de ello son los tejidos Aquaclean que aúnan durabilidad y practicidad. El cuero es un material natural muy transpirable e higiénico y aporta una belleza natural al acabado del sofá. Así mismo, el material del soporte o estructura del sofá es también muy importante para garantizar la vida útil del mueble. Debemos fijarnos en soportes resistentes hechos con madera o con metal. Las patas : Por supuesto, respondiendo a cómo elegir el sofá adecuado, hay que considerar también las patas. Si la limpieza es una parte muy importante de tu vivienda, entonces es aconsejable que te fijes en la altura. Un sofá con patas elevadas a parte de su estética te aportará una limpieza cómoda además de poder utilizar aspiradores autónomos. Así mismo, fíjate en el acabado de las patas, si son de madera o metálicas, barnizadas o galvanizadas, en función del clima, humedad ambiental, etc… unas patas pueden ser más aconsejables que otras.
: Por supuesto, respondiendo a cómo elegir el sofá adecuado, hay que considerar también las patas. Si la limpieza es una parte muy importante de tu vivienda, entonces es aconsejable que te fijes en la altura. Un sofá con patas elevadas a parte de su estética te aportará una limpieza cómoda además de poder utilizar aspiradores autónomos. Así mismo, fíjate en el acabado de las patas, si son de madera o metálicas, barnizadas o galvanizadas, en función del clima, humedad ambiental, etc… unas patas pueden ser más aconsejables que otras. Brazos del sofá : Aunque muchas veces es solo cuestión de gustos, por lo general podemos hacer una distinción de dos tipos de brazos: Los funcionales y los de diseño . El primero de ellos está más pensado para dormir o tumbarse sobre el sofá, busca la funcionalidad mientras que en el segundo se busca más una función decorativa.
: Aunque muchas veces es solo cuestión de gustos, por lo general podemos hacer una distinción de dos tipos de brazos: Los . El primero de ellos está más pensado para dormir o tumbarse sobre el sofá, busca la funcionalidad mientras que en el segundo se busca más una función decorativa. Color: Otra de las cosas que debes tener en cuenta a la hora de elegir un sofá es su color. Aunque esta es una cuestión meramente decorativa, es muy importante para que combine con la decoración y el resto de muebles de la vivienda.
Cómo saber si un sillón es bueno
Por ser uno de los aspectos más importantes a la hora de comprar un sofá cómodo, hemos decidido sobresaltar este punto del resto. Y es que la elección del sofá va a estar en gran medida condicionada por la comodidad de sus asientos y respaldos. Para maximizar la vida de un sofá los asientos tienen que soportar el paso del tiempo sin deformarse y eso solo será posible si las espumaciones son de calidad. Unas espumaciones económicas pueden dar una falsa sensación de comodidad al principio, pero con el paso del tiempo acabaran deformándose y provocando una postura incorrecta y los consiguientes dolores de espalda. Además del bloque de espuma son de vital importancia las diferentes capas que se le añaden para formar el conjunto del asiento, estas pueden ser variadas, fibras, viscoelástica etc… y son las que dan el acabado final de confort al conjunto.
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